Impacto colectivo, un propósito que necesita de todos

Por Alejandra Espinosa Harris

Directora ejecutiva de la Fundación Mamonal

El año 2017 cierra para la Fundación Mamonal con un balance que se mantiene positivo gracias a la confianza y apoyo de nuestros afiliados, aliados y socios. Los frutos de las decisiones estratégicas tomadas en 2016 frente a centrar nuestro foco de acción en Cartagena y Bolívar, si bien significaron renuncias a procesos y recursos en otros territorios, nos compensó en aprendizajes, producto de la serena autoevaluación y profunda reflexión sobre nuestro trabajo y nuestro rol en Cartagena.

Los acontecimientos políticos en la ciudad, alimentaron esta reflexión y si bien tenemos la tranquilidad de haber realizado un trabajo con todo el compromiso, transparencia y entrega durante más de 40 años, siempre hay oportunidad para hacerlo mejor y aportar aún más. 

Los retos de ciudad en materia de superación de pobreza, desigualdad y educación, requiere de todos, construir apuestas de impacto colectivo, en las que nos encontremos, compartamos y colaboremos, aceptando renunciar a las importantes acciones individuales que como organización desarrollamos y vincularnos a los procesos que la ciudad requiere para superar sus problemas más apremiantes. El discurso acusador a lo político no es una opción, menos cuando todos hacemos tenemos incidencia y somos parte de ello y es en esta esfera de las decisiones, donde se manejan los temas más importantes para Cartagena.

Involucrarnos es una necesidad, pero esto requiere de construir relaciones de confianza y es justamente aquí donde debemos ejercitarnos, para iniciar compartiendo los aprendizajes y reconociendo en los otros su experiencia y oportunidades de aportes a las soluciones que la ciudad demanda. Nosotros por ejemplo, hemos decidido renunciar al término beneficiarios, una palabra que tradicionalmente usamos en el sector social para mencionar a aquellas personas a las cuales llegamos con nuestros programas y proyectos, en cambio lo que hemos comprendido, es que más que tener unos depositarios de beneficios contamos con socios que nos dan la oportunidad de trabajar con ellos, poniendo a disposición su tiempo y compromiso para juntos desarrollar procesos que buscan transformar positivamente realidades.

Un ejemplo de trabajo con esos socios, aliados y ciudadanos, es la iniciativa del Plan Maestro de Educación para Cartagena, en el cual más de dos mil personas han participado en su construcción; ésta es una iniciativa que venimos impulsando bajo el convencimiento de que es la Educación la única manera sostenible de superar la pobreza. Creemos como colectivo social civil y empresarial que somos, en la necesidad de impulsar apuestas de ciudad que nos permitan generar diálogos de muchas voces y propuestas de largo plazo que nos convoquen a alinear las acciones a propósitos superiores y no solo a nuestras metas institucionales.

La Educación es y seguirá siendo nuestra apuesta, en los diferentes frentes de acción que desarrollamos nuestro actuar siempre tiene como propósito un proceso pedagógico. Hoy con muchos aprendizajes por los aciertos y desaciertos, compartiremos en este informe nuestras acciones con una invitación especial a construir agendas de impacto colectivo por el desarrollo de nuestra ciudad y región, que nos convoquen a trabajar en equipo.

Necesitamos construir nuevas narrativas de ciudad y eso nos exige innovar y actuar en concordancia con ese propósito, por ello colaborar, compartir y reconocer son retos que como organizaciones, colectivos e individuos debemos desarrollar de manera destacada. Estamos seguros que con propósitos claros, compromiso y persistencia en la causa, lograremos resultados que hasta hoy los recursos económicos solos no han alcanzado.

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